En los últimos años, América Latina ha sido testigo de una ola de protestas a nivel mundial que han sacudido la región y han marcado un cambio significativo en la política y la sociedad de muchos países. Estas manifestaciones han surgido como respuesta a una serie de problemas y desafíos que afectan a la población, desde la desigualdad económica y la corrupción hasta la represión estatal y la falta de representación política.
Las protestas son un fenómeno global que pueden encontrarse en todos los rincones del mundo, incluida África. Este continente diverso y rico en culturas ha sido testigo de numerosas protestas a lo largo de su historia, motivadas por una variedad de problemas sociales, políticos y económicos.
Las protestas globales han estado sacudiendo diferentes regiones del mundo, y Europa no ha sido la excepción. En los últimos años, hemos sido testigos de un aumento en la cantidad de manifestaciones y protestas en varios países europeos, donde la gente ha salido a las calles para expresar sus inquietudes y demandas.
En los últimos años, hemos sido testigos de un incremento significativo en protestas a nivel global, con un enfoque particular en las protestas que han tenido lugar en Estados Unidos. Estas manifestaciones han abordado una variedad de temas, desde la brutalidad policial hasta la desigualdad económica y racial.